Opinión de
gabamila
en 10/01/2017
LA PEOR EXPERIENCIA DE MI VIDA. Hice una cita con el Dr. Alejandro Serralde Alfonso en su consultorio ubicado en Uxmal 96-Bis, esq. Morena, Narvarte, en el 26 de noviembre de 2016. Mi intención era hacer una sesión de escleroterapia para eliminar unas pocas várices del tipo “arañitas” en los muslos de mi piernas, una cuestión puramente estética. Me informó su secretaria que el precio de la consulta incluyendo la aplicación de la inyección era de M$X 600,00. Al llegar a mi consulta le expliqué al Dr. Alejandro el motivo por el cual le busqué, y también le dije que en el pasado ya había hecho 3 sesiones de escleroterapia y que me habían funcionado muy bien, ya que después de 3 años ninguna de las arañitas había vuelto a aparecer, pero que me sobraron unas pocas en los muslos y por eso me consultaba con él, para eliminarlas. Él me examinó y dijo que no podía inyectar el líquido de la escleroterapia en las arañitas de mi muslo, sino que tendría que inyectar en la vena que estaba alimentando todas las arañitas, una vena gigante que él me enseñó con una luz roja que empezaba desde un poco arriba de mi pie e iba hasta arriba de mi muslo (supongo que es la safena, ya que el sr. nunca me dejó claro cuál era). Yo le dije que no pensaba hacer un tratamiento tan complejo, el de SECAR TODA UNA VENA de mi pierna, y le pedí que hiciera las aplicaciones solamente en las arañitas. Él dijo que eso de nada serviría y que lo ideal era secar la vena, lo que demandaría varias sesiones. Yo me espanté y le dije que no había ido preparada para eso, que me diera chance de pensar y volver otro día más emocionalmente preparada, al final la cosa tal como él la describió era más grave de lo que yo esperaba. Así que el Dr. Alejandro se enojó y me dijo: “no, no hace falta que regreses, PACIENTES COMO TU NO LOS NECESITO”, yo le dije: “pero doctor es que…”, me interrumpió y dijo que pagara la consulta. Le pregunté si tenía que pagar el valor total, mismo sin haber hecho la sesión de escleroterapia (la tal consulta había tardado sólo unos 10 minutos en total). Me dijo que sí porque él cobraba por su tiempo. Yo le dije que me cobrara la mitad porque no había hecho las aplicaciones que estaban incluidas en el precio. Y por fin el GROSERO, SIN ÉTICA Y MAL MÉDICO Dr. Alejandro me dijo: “ya ándate de aquí, búscate a otro médico”. Finalmente busqué otro médico y le conté mi experiencia. Me dijo que estuvo bien que yo no haya permitido que Don Alejandro inyectara ese líquido en mis vena porque este no es el procedimiento correcto. Realmente ese señor lo que quería era transformar una consulta de 600 pesos en un tratamiento larguísimo que le rendiría muchos y muchos pesos, pero que a mi me hubiera provocado problemas de salud. UN ABUSO, UNA FALTA DE RESPETO Y UNA TOTAL FALTA DE PROFESIONALISMO DE SU PARTE.
